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La industria es un sector clave en el conjunto de la actividad económica de cualquier país desarrollado, de acuerdo con el último informe del Consejo Económico Social (CES), de diciembre de 2019 “la industria manufacturera genera, de forma directa, el 13% del PIB y el 12% del empleo, cifras que se elevan hasta el 43% y el 30% respectivamente, considerando sus efectos indirectos e inducidos sobre la economía española, siendo responsable del 92% de las exportaciones de mercancías y liderando la inversión privada en investigación, innovación y desarrollo tecnológico”.

Aumenta el interés por la industria

Sin embargo, la industria manufacturera española, al igual que la de la práctica totalidad de los países de su entorno, ha sufrido una significativa pérdida de peso en el conjunto de la actividad económica. En este contexto, con el objetivo de detener el proceso de desindustrialización y, tras haberse observado que aquellos países que contaban con sectores industriales más potentes y desarrollados han demostrado tener una mayor capacidad de resistencia a la crisis económica, en los últimos años se ha renovado el interés por la industria, tanto a nivel comunitario como nacional. Así se enmarca la inclusión de la industria como una de las siete iniciativas emblemáticas recogidas en la Estrategia Europa 2020, y el objetivo de recuperar su peso sobre PIB al 20% en 2020.

La política industrial debe situarse como una de las prioridades políticas, adquiriendo mayor protagonismo en el conjunto de la administración pública y garantizándose la coordinación de todas las políticas con incidencia en el sector, como son aquellas con finalidad regional, cuyo  objetivo es el de apoyar el desarrollo económico e industrial y la generación de empleo en las regiones más desfavorecidas.

En este ámbito, destacar la labor de la Administración General del Estado mediante el uso de los diferentes Fondos Comunitarios, Incentivos Regionales y de los Fondos de Compensación Intererritorial (FCI), actuaciones en muchas ocasiones impulsadas por los diferentes gobiernos regionales, muchos de ellos con competencias transferidas para la adjudicación de ayudas.

Comunidad Valencia: ejemplo de apoyo al sector industrial

Una comunidad que está realizando un importante apoyo al sector industrial es la Comunidad Valenciana. Sus empresas se ven favorecidas por la clara apuesta de la Administración Regional, que persigue apoyar tanto a sus sectores tradicionales como aquellos con mayor proyección, abriendo periódicamente convocatorias de ayudas, a través de préstamos bonificados y subvenciones a fondo perdido. Y todo este esfuerzo tiene su recompensa: a pesar de que las expectativas para 2020 son menores que en el 2019, determinados estudios (BBVA Research) indican que, la mejora de la inversión en maquinaria y equipo de los últimos años podría favorecer el dinamismo y el avance de la industria en algunas comunidades, poniendo la Comunidad Valenciana como ejemplo.

En esta política industrial autonómica destacan diferentes entidades, encabezadas por la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, seguida del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE), la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) y Conselleria de Hacienda y Modelo Económico, que favorecen al tejido empresarial valenciano con una dotación presupuestaria ya asignada para 2020, de más de 68 millones de euros. El principal grueso de este presupuesto se destinará a PYMEs, que suponen el mayor porcentaje de industria valenciana.

Justo en este arranque de año se ha abierto el plazo para un primer lote importante, tanto para inversión como para desarrollo de estrategias en I+D, afianzando ese refuerzo económico tan necesario en las industrias para mejorar su competitividad y sostenibilidad económica. Contáctanos y te asesoramos en todo el proceso.

Mónica Pedrós

Coordinadora Línea Ayudas – Valencia

INCOTEC

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